El plátano maduro es un tipo de plátano que se considera maduro cuando su cáscara se vuelve más oscura (marrón o negra), y el interior se vuelve más dulce y suave. Este tipo de plátano es diferente al plátano dulce común, ya que tiene una textura más firme y densa, lo que lo hace perfecto para freír, cocinar o triturar.
El plátano maduro generalmente se consume frito, ya que desarrolla un sabor dulce y caramelizado, y se vuelve crujiente por fuera mientras permanece suave por dentro cuando se cocina en aceite o se hornea.